¿Qué sabes del salto del pastor canario?

El origen volcánico de las Islas Canarias ha dado al archipiélago paisajes imponentes llenos de montañas empinadas, terreno rocoso y acantilados abruptos. El salto del pastor es una práctica que idearon los pobladores aborígenes para superar los desniveles del terreno volcánico para utilizar la tierra para actividades agrícolas.

Este método innovador involucraba a los pastores que usaban un palo de madera o una lanza para cruzar el campo y saltar con pértiga sobre valles y acantilados, de ahí su nombre.

Los movimientos del salto del pastor

El salto del pastor canario consiste en clavar el extremo de la lanza (regatón) en el suelo y adoptar diferentes posiciones de las manos o del cuerpo, según se quiera descender, trepar o incluso frenar. Estas posiciones se denominan mañas y se relacionan con la forma en que se colocan las manos y los brazos sobre la lanza, y la posición que adopta el resto del cuerpo.

Es posible saltar con la lanza al costado del cuerpo o al frente del cuerpo. Para descender, los participantes suelen optar por un deslizamiento suave con la punta de la lanza apoyada en el suelo.

Regatón muerto

Una técnica increíble utilizada en el salto del pastor se conoce como salto a regatón muerto. Se trata de una habilidad visualmente espectacular en la que ni siquiera la punta de la lanza se apoya en el suelo, por lo que se requiere una agilidad considerable que permite alcanzar hasta el doble o el triple de la longitud de la propia lanza.

Recuperación del salto del pastor

Como muchas tradiciones, con el tiempo, la práctica del salto del pastor, fue disminuyendo. Sin embargo, en la década de 1990 se formaron colectivos conocidos como jurrias y se hizo un esfuerzo para evitar la pérdida de la práctica. Hoy existe una veintena larga colectivos en todo el Archipiélago, que suman más de 500 personas.

Bien de Interés Cultural

En mayo de 2018, salto del pastor fue declarado Bien de Interés Cultural por el Gobierno de Canarias. El deporte autóctono, que data del siglo XV, todavía se practica en Canarias como afición o deporte de ocio por parte de aficionados que continúan con la tradición.

Quienes practican el salto hoy no necesariamente tienen que ser pastores, ni necesitan saltar como en el pasado. El salto del pastor hoy tiene más un componente lúdico, con un riesgo moderado, que permite a los participantes disfrutar de la naturaleza y mantener la tradición.

Los nombres del salto del pastor

El salto del pastor se practica en las ocho Islas Canarias, sin embargo, las islas tienen diferentes nombres para el palo de madera utilizado: lanza en La Palma y Tenerife; asta en El Hierro; astía en La Gomera; garrote en Gran Canaria; y lata en Lanzarote y Fuerteventura. Además del nombre, también varía la madera de la que están hechas las lanzas. La mayoría están elaborados con pino canario, acebuches, hayas, faya, la riga de Honduras o fresno.

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